Vallecito Encantado es un sitio a 34 km de la ciudad por la ruta 40 hacia el sur. Las formaciones provienen de la era Paleozoica, período Carbonífero, que supone unos 360 millones de años de antigüedad. Las rocas estás constituidas por material sedimentario tipo areniscas solidificadas, que ante lluvias y vientos se disolvieron y adoptaron formas extrañas. Es un pequeño paseo de entrada libre y gratuita.
Excursión a Laguna Brava
La reserva Laguna Brava fue creada por la Ley 3944 el 7 de marzo de 1980 y en 1996 se la declaró Reserva Provincial de Vicuñas y de Protección de Ecosistemas de Laguna Brava. La altura, el camino difícil y el clima implacable son componentes de un riesgoso turismo de aventura y no debe tomarse livianamente el paseo. La mejor época es entre octubre y marzo, cuando comienza el deshielo. Es requisito ingresar acompañado por un guía registrado y habilitado. Se pueden contratar en Villa Unión, Vinchina e incluso Jagüe. Nosotros fuimos por nuestra cuenta hasta Jagüe y allí nos unimos a una caravana que había salido desde Vinchina con su guía que iba en el primer vehículo de la caravana y le daba a cada auto un handy a través del cual se comunicaba con todos e iba describiendo cada tramo del camino.
Para trepar hasta los 4.320 m de la Laguna Brava, no hace falta 4x4.
Al llegar a los 3.600 metros aparece el refugio El Peñón, el primero de una serie de 13 que se construyeron entre 1864 y 1873. Tienen una forma circular. El ingreso es espiralado y la puerta apunta al este, en dirección contraria al viento predominante que suele venir del oeste; en los muros, unos ventanucos mínimos y, en el techo, una abertura que habilita hacer un buen fuego adentro. Fueron la salvación de los arrieros durante décadas.
Esta zona es una reserva de vicuñas. Se las puede ver a partir de los 3500 m de altitud.
Al llegar a la Laguna Brava uno puede ver que es serena y poco profunda (apenas medio metro) y sus aguas son hipersalinas. Está en un inhóspito valle a 4.270 msnm, sin árboles ni arbustos que den sombra o protejan de los vientos. Todo el horizonte es de montañas, con picos sobresalientes como el Bonete Chico, de 6.759 msnm, el Bonete Grande, de 5.945, el Pissis (en Catamarca), que con 6.882 es el segundo de la Cordillera de los Andes -después del Aconcagua-, y el Veladero, que custodia la Laguna Brava por el oeste con sus 6.436 msnm.
Se ven los restos del avión Curtiss, que una mañana despejada de mayo de 1964 usó la laguna como pista de aterrizaje. Cuenta la historia que las seis yeguas preñadas y de pedigrí que llevaba el avión desde Perú hacia Buenos Aires murieron, o fueron sacrificadas, pero una se habría salvado y sería la responsable del linaje de todos los pingos ganadores que andan dando vuelta por esos pagos.
Laguna Brava fue declarada Sitio Ramsar, denominación que deviene del nombre de la ciudad iraní donde se firmó la convención internacional para proteger los humedales que son estaciones de aves migratorias, en este caso de flamencos rosados.
Hay una excursión que combina Laguna Brava con la travesía hasta el Cráter Corona del Inca, que es una exclusivamente para vehículos 4x4 y muy exigente.
Cuesta de Miranda
La mítica Cuesta de Miranda es un tramo sinuoso de la Ruta 40 atravesando el paso entre la Sierra de Famatina y la Sierra de Sañogasta, siguiendo el ancestral Camino del Inca entre Villa Unión y Chilecito en la provincia de La Rioja. Era famoso por su dificultad: angosto camino de cornisa que colgaba de las abruptas paredes de la quebrada del río Miranda. Tuvo 320 curvas hasta que fue pavimentado en octubre de 2015. Hoy en día es un una ruta segura y convencional de ancho normal y menos curvas aunque no menos hermosa.
El paisaje es notable debido a los colores de las rocas ocres y rojas, el río, los cactus, y el valle sinuoso y escarpado.
Parque Nacional Talampaya
El Parque Nacional Talampaya, es un Área protegida Nacional, ubicada a 60 km al sur de la ciudad de Villa Unión por la ruta 76. Esta área protege una muestra de la región de monte, sierras y bolsones, yacimientos arqueológicos y paleontológicos y los estratos más antiguos del periodo triásico.
Creado en el año 1975 como parque provincial con el objeto de resguardar yacimientos arqueológicos y paleontológicos, en 1997 pasa a depender de la Administración de Parques Nacionales. Cuenta con 215 mil hectáreas.
En Diciembre de 2000 la UNESCO lo declara Patrimonio Natural y Cultural de la Humanidad junto con Ischigualasto (Valle de la Luna) debido a que conjuntamente resguardan la era del Triásico completa. El parque cuenta con rocas que documentan la evolución del planeta por más de cuarenta y cinco millones de años, siendo por ejemplo testigo hace más de 250 millones de años de la división del supercontinente Pangea.
El nombre Talampaya corresponde al extinto idioma cacán y significaría: río seco del tala.
Su clima es cálido y árido, con una importante amplitud térmica diaria e intensa radiación solar. Se puede visitar todo el año, aunque en verano las intensas lluvias suelen dificultar el acceso a turistas. También se recomienda tener en cuenta que el Parque alcanza el pico de visitantes en Semana Santa y Vacaciones de Invierno.
Hay distintas excursiones para realizar que se pueden consultar en la página del parque y realizar también las reservas.
En la entrada del Parque Nacional Talampaya hay un sendero autoguiado donde se pueden descubrir algunas de las criaturas que habitaron esta zona hace 200 millones de años.
Dentro del parque hay un camping pago (no es caro) que cuenta con parcelas delimitadas, con fogones y tomas de luz. Cuenta con baños y duchas con agua caliente que están impecables, un restaurant y Wifi!!! No hay señal de celular en el parque.
Una de las excursiones es la del Cañón Arco Iris y Ciudad Perdida. Su acceso se encuentra más al sur por la ruta 76 y es administrada por una entidad diferente a la del Cañón de Talampaya. Fuimos sin reservar y no tuvimos inconvenientes pero era una época de baja cantidad de turistas. Estos paseos cuentan con vehículos propios y luego es un trekking de baja dificultad y duran de 3 a 4 horas.
A medida que se avanza hacia el interior del cañon, uno retrocede en el tiempo, caminando por estructuras que tienen millones de años y que en esta zona del planeta han quedado al descubierto por acción de movimientos terrestres. Los diversos colores que se aprecian hacen que el paseo sea muy vistoso y entretenido, y dan nombre por supuesto al cañon. En general, los colores, que van desde rojos fuertes hasta tonos verdes e incluso algún blanco, delatan la antigüedad de cada estrato.
La caminata llega a su fin cuando se divisan las enormes formaciones rocosas que simulan un conjunto de altos edificios que parecieran estar abandonados y percudidos por el paso de los años. Se trata de la Ciudad Perdida.
Ya en el Cañón de Talampaya, tomamos la excursión que además de recorrer el cañón llega hasta un sitio que se llama Cañón de Shimpa. Esta excursión dura 4 hs y se hace en un camión 4x4. En la primer parada se ven petroglifos. Sobre los paredones y piedras se formó una pátina oscura natural de dióxido de manganeso (o barniz del desierto). Diversas culturas desde hace 5.000 años fueron grabando con puntas de cuarzo o granito sus manifestaciones artísticas.
Entre las figuras halladas pueden mencionarse dibujos mascariformes, a los que se les adjudica un significado mágico-religioso, signos tridígitos (pisadas de avestruz), formas humanas estilizadas, algunas de las cuales simbolizarían divinidades, improntas de pies, guanacos, dibujos zigzagueantes y cruciformes, pisadas de pumas, soles, hombres con “alas de mariposa”, etc.
Son conocidos los dos "astronautas", ubicados en la entrada al cañon de Talampaya; dos figuras humanas, al parecer con escafandras, que aparecen señalando el cielo y la tierra.
Delante de estos petroglifos se advierte la presencia de 19 morteros, llamados también "piedras tacitas", que forman oquedades en la piedra. Estos elementos junto a fragmentos de cerámica hallados junto a dos pequeños recintos, a mano izquierda de La Puerta, denotan la presencia de pueblos agroalfareros.
La formación Talampaya está compuesta por una aglomeración de rocas de color rojo parduzco. Las paredes de 150 m. y el cañón del río Talampaya fueron erosionados por el viento y el agua, dándoles curiosas formas. Los estratos están principalmente formados por arenisca depositada por los abanicos aluviales que bajaron de los bordes de la cuenca. Esta roca, debido a la erosión eólica de millones de años, con sus areniscas y arcillas de múltiples colores, adquirieron diversas formas. Muchas de esas formas tienen nombres propios como: el Fraile, el Rey Mago, la Catedral, el Tablero de Ajedrez, las Agujas, el Pesebre y el Castillo.
El Cañón de Shimpa se diferencia del anterior en que es un cañón mucho más angosto y sus paredes se levantan unos 80 metros. Tiene una extensión de seis kilómetros, pero la caminata sólo recorre uno. Pudimos ver a muy poca distancia los nidos de los cóndores.