Compramos la primer casa rodante en 2004. Era usada, modelo 1979 y medía 3.30 m. Tenía dos camas cuchetas y un comedor que se hacía cama, cocina de dos hornallas, agua fría en el baño y la cocina y un inodoro con piedritas para gato!!! Sólo para urgencias, ya que siempre fuimos a campings con esta casa rodante. Le pusimos un calefactor a gas y luz a 12v con una batería. La disfrutamos muchísimo. Hicimos dos viajes largos: el primero en 2005 desde Bariloche hacia las Cataratas del Iguazú, pasando por Rosario, Entre Rios, Corrientes y volviendo por Santa Fé y Córdoba. El segundo en 2006 por la ruta 40 recorriendo Mendoza y San Juan hasta El Valle de la Luna y Talampaya. Obviamente la usamos muchísimo cerca de Bariloche. Hay fotos en el Brazo Rincón, pescando en el Río Chubut, cuando la pintamos nosotros y de pijamas party de las chicas y sus amigas. La última foto es de su destino final, como casa en una chacra en El Hoyo, ya que después de tanto uso y con los años que tenía, comenzó a descuadrarse la estructura.
La segunda casa rodante fue una Acapulco de 5.20m. La compramos en el 2014. Aquí tuvimos más comodidades, además del gran tamaño. Cama doble independiente del comedor y dos camas cucheta. Baño y cocina con agua caliente. Ésta vez sí inodoro con cámara séptica. Cocina con horno y heladera. Calefactor a gas y aire acondicionado. La electricidad a 12v la obteníamos de una batería que cargábamos con un generador eléctrico o cuando nos conectábamos a una red de 220v. Además de los campamentos en el Brazo Rincón, viajamos a Puerto Madryn, Piedra Parada y en el 2015 nuestro gran recorrido por la Patagonia, bajando por la Ruta 3 y volviendo por la Ruta 40. Tuvimos diferentes carpas comedor y hasta el cobayo Navi acampó con nosotros. La vendimos durante la pandemia con la idea de comprar alguna que nos diera más autonomía. Ahora anda por El Foyel.
Y en 2021 compramos la Heevel de 4.50m. Un poco más corta pero con el espacio mejor aprovechado. Cama doble, living-comedor gigante y lleno de ventanas que se transforma en otra cama doble, baño y ducha independientes, heladera y climatizador a 12v y lo que nos permitió la autonomía que buscábamos: tanques de agua más grandes, paneles solares, conversor de 12v a 220v y sistema para cargar la batería cuando la camioneta va andando. Una belleza. En el poco tiempo que hace que la tenemos ya hizo dos viajes a San Antonio Este, campings de la zona, el Río Malleo y el último gran viaje recorriendo San Juan, La Rioja y Catamarca. Este viaje nos hizo querer nuevas cosas... y ya tenemos un nuevo proyecto que, como es a mediano plazo, nos va a permitir disfrutar de esta casa un tiempo más.
Y finalmente... presentamos el proyecto más loco que hemos tenido hasta ahora. En el último viaje sentimos que con la casa rodante no podíamos meternos en cualquier lugar o camino y salir de las rutas transitables. En Catamarca nos llegó la inspiración de la mano de un matrimonio mayor manejando su motorhome 4x4 por un camino muy difícil. Y nos compramos esta reliquia: un camión Mercedes Benz 1113 modelo 1963 que originalmente fue del Ejército, que mecánicamente está impecable y vamos a transformar en la casa rodante de nuestros sueños. Para andar despacio en todos esos caminos difíciles y dormir donde la noche nos encuentre. Calculamos un par de años para hacer el proyecto que ya tenemos dibujado.

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